“Todos los gestos de mi cuerpo y mi voz para hacer de mí la ofrenda, el ramo que abandona el viento en el umbral” Alejandra Pizarnik
Me retrato sumergida en una naturaleza recreada, intento unirme a la tierra y al cielo por medio de un reflejo, como una mimesis que enaltece aquello que imita. Me invento en fotografías como una figura coronada de pájaros, crecida de un agua que alimenta también a peces o con cuerpo de enredadera, como una mujer en constante mutación, ser que genera vida en un despertar o florecer, que deviene en frutos o semillas. Mis creaciones son elementos gestuales o simbólicos de una relación con el entorno: rodeada de naturaleza, el espacio de donde surgen las metáforas que me visten, o de pie frente a grandes edificios que cubren esa tierra y ese cielo. Adornada con mis pequeñas construcciones de materiales frágiles, sostengo ramas de plástico o flores de tela, que recuerdan a las verdaderas, esas que están lejanas, las mismas que en este ritual son adoradas.